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viernes, 20 de octubre de 2017

Educadores de Bogotá rechazan el presupuesto nacional

El presupuesto aprobado para educación es un atentado a los acuerdos firmados con Fecode: comunicado de la Asociación Distrital de Educadores



El Gobierno nacional se ufana que el presupuesto general de la nación para el 2018, por un total de 235,6 billones de pesos, destinará 37 billones de pesos para la educación y que supuestamente es el sector más beneficiado. Todas son mentiras.

La Asociación Distrital de Trabajadores y Trabajadoras de la Educación (ADE) rechaza de manera enfática que el Gobierno quiera disfrazar la realidad de las cifras económicas del país con el argumento de un aumento del presupuesto para educación. Primero, aclaramos que este incremento es falso: con las reformas al Sistema General de Participaciones (SGP), el déficit progresivo de los recursos del Gobierno destinados al sector educativo es tan alto que esos billones para el próximo año no alcanzarán a cubrir ni siquiera los gastos mínimos y recordemos que para este año tocó adicionar en más de 1,3 billones de pesos el presupuesto, entre otras cosas para el pago de salarios de los educadores.

Con este presupuesto, Colombia no va ser la más educada, y la jornada única es solo un discurso electoral, ya que esta solo se puede hacer en el país con importantes inversiones en infraestructura educativa, alimentación escolar, incluso salarios de los docentes. Nada de esto será posible de sostener porque el Gobierno no ha hecho nada por cubrir la deuda pendiente y que sigue creciendo. A pesar de que en el paro del magisterio este año se advirtió la necesidad de reformar el SGP e incrementar el porcentaje del PIB para educación, esto no se vislumbra en el proyecto aprobado. El Gobierno con este presupuesto aprobado echa al traste los acuerdos firmados con Fecode, y nos pone en estado de alerta a los educadores colombianos.

Otro problema que no se menciona: esos casi 37 billones tienen serios problemas de distribución. En su mayoría, se destinan a financiar programas como Ser Pilo Paga, que tienen en crisis a las universidades públicas, porque son dineros que terminan en arcas de universidades privadas; o al Icetex, que se ha convertido en el banco cobradiario de miles de familias colombianas.

El ministro de Hacienda pretende con estas falsas noticias enmascarar problemas de fondo, como que la reforma tributaria no ha servido para inyectar más recursos sino para asfixiar económicamente a las familias y hasta el comercio nacional. Con la subida de impuestos, los hogares se apretaron el bolsillo y están restringiendo las compras porque los salarios alcanzan menos.

Este presupuesto es un insulto al pueblo colombiano, puesto que prioriza aún en el gasto en guerra y ni siquiera dirige recursos suficientes a la implementación de los acuerdos de paz. Además, autorizó el asalto al Fondo Nacional del Ahorro por 500 mil millones de pesos con la excusa de trasladarlos a las universidades públicas, deportes, ciencia y tecnología. Esto es un descalabro, usar los ahorros de los mismos colombianos para inversión en sectores que son responsabilidad del Estado.

La ADE reitera su rechazo a este presupuesto amañado, porque confirma el talante neoliberal de este Gobierno. Los maestros y maestras continuamos vigilantes al cumplimiento de los acuerdos firmados en junio pasado, en especial la reforma el SGP para asegurar mayor financiación de la educación pública. Este remedo de aumento no responde a los requerimientos del sistema educativo, por lo cual, de ser necesario, el próximo año tendremos que salir a las calles, junto a estudiantes y trabajadores, a exigir que sí se aporten los recursos obligatorios para garantizar educación pública de calidad.

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