La residencia de Gilberto Salinas Novoa fue allanada de forma violenta y sin orden judicial, el pasado domingo 14 de julio, después de las ocho de la noche, con el pretexto de un asesinato en el barrio y que el sicario se había ocultado en esta residencia.
Al parecer, con la complicad del agente retirado, Darwin Lozano Barrios, que habita a continuación de la casa de Salinas Novoa, los uniformados entraron, saltaron la tapia y encañonaron con pistolas a su hijo, que en ese momento salía del baño, y a su padre, que a esa hora, acostado, veía televisión.
Salinas Novoa, solicitó la orden judicial de allanamiento y una explicación al absurdo operativo policial, no obteniendo respuesta. Solo lanzaban amenazas, sindicándolos de cómplices y portadores ilegales de armas. Una vez requisaron meticulosamente la habitación se marcharon sin dar explicación.
Según Gilberto Salinas Novoa, el autor intelectual de la ilegal operación policial, es el agente retirado, Darwin Lozano Barrios e incluso, el hijo de este que también es policía. El dirigente comunista, líder agrario y de derechos humanos, denuncia que hace más de seis meses viene siendo víctima de hostigamiento por estos miembros de la fuerza pública, donde le sacan videos, fotografías, le llegan agentes de civil y otras formas de acoso represivo e ilegal.
En virtud de lo anterior, el dirigente comunista ha instaurado una demanda penal contra los dos vecinos y los policías que participaron del allanamiento ilegal.
Habla Salinas Novoa
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| Gilberto Salinas Novoa. |
Preguntado Salinas Novoa, le respondió así al semanario VOZ:
–Dice usted que le allanaron la casa, porque era rumor que había habido un muerto en el barrio. ¿Cómo se dio cuenta usted de esa versión?
–De la versión me enteré después. Ellos se retiraron y yo llamé a mi abogado y a los compañeros de Derechos Humanos. Me preocupaba que la policía no daba ninguna explicación, solamente actuaba como si la casa fuera de ellos. Darwin Lozano Barrios fue el que entró la policía por la casa de él, ingresaron por la tapia y me hicieron el allanamiento sin ninguna orden judicial, y mucho menos haber méritos. Todo estaba en silencio, todo estaba quieto y después salieron con el cuento que había habido un muerto y que el sicario se había metido a mi casa, lo cual no es cierto, porque la puerta estaba cerrada. Además, no hubo ningún muerto en el barrio.
–¿Por qué sabe usted que el policía retirado tiene videos suyos?
–Porque lo dijo en la inspección de policía del barrio Jordán cuando nos demandó. Él mismo dijo: “Yo tengo videos y lo seguiré filmando”. En la inspección del medio ambiente en el barrio Belén, también allá hay un video que él lo ha tomado y él lo ha dicho públicamente, está escrito, que él me sigue sacando videos.
–¿Teme por su seguridad, por su propia vida?
–Sí, bastante temo por mi seguridad, porque él, con sus propias palabras en la inspección de policía del barrio Jordán, dice que no va a permitir que nosotros sigamos ahí. Incluso, nos lo ha dicho verbalmente que él no nos va a dejar trabajar y que va a hacer hasta lo imposible por sacarnos de ahí.
–Ante esta situación ¿Qué ha hecho?
–En primer lugar, he asistido a todas sus demandas, tengo copia de ellas. Me he quejado ante la Defensoría Regional del Pueblo, tengo copia de eso; los compañeros de Derechos Humanos en Bogotá ya están haciendo una denuncia ante la Procuraduría General de la Nación, ante derechos humanos del orden nacional e internacional y ante la Defensoría Nacional del Pueblo en Bogotá. Además, vamos a llevar un proceso penal en contra de estos personajes, específicamente en contra de la fuerza pública involucrada en este hecho bochornoso.
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